miércoles, 6 de febrero de 2008

Los caminos reales y senderos se recuperan

UN PUEBLO QUE DA EJEMPLO DE GRANCANAREIDAD
La dinamización de la economía local es una de las grandes apuestas del actual grupo de gobierno de Valleseco. De esta manera, han decidido poner en marcha un proyecto de recuperación de senderos y caminos reales, con el fin de promocionar turísticamente el municipio y recuperar el patrimonio natural, cultural y etnográfico de la localidad.
Esta iniciativa pretende dar un empujón a la economía local, intentando conseguir nuevos ingresos a través del turismo rural, ayudando a los comercios, restaurantes y demás negocios de la zona.
Además, también se trabajará sobre los caminos vecinales, intentando ampliar el ancho de estos para facilitar las labores de los agricultores y ganaderos.

viernes, 1 de febrero de 2008

La ruta de las manos creadoras

BIEN POR NUESTROS ARTESANOS


Ángel del Rosario Hernández, Inmaculada Cárdenes Alemán y Juan García González son sólo tres de una saga de artesanos que trabajan en Valleseco, dedicando su vida a llenar la de los demás con objetos que son verdaderas obras de arte.
«Dedicación, afición y pasión». Esos son los tres sustantivos que definen la profesión a la que se dedican estos maestros.
Cada uno ha encontrado por distintos caminos esta forma de ganarse la vida. Ángel del Rosario, por ejemplo, comenzó a bregar con la piedra porque no encontraba trabajo y, a través de un taller de empleo de un Ayuntamiento, se introdujo en el mundo de la cantería en Arucas, donde aprendió su oficio, convirtiéndose ahora en un afamado profesional al que le llueven las ofertas de empleo, gracias al «boca a boca y al trabajo bien realizado», explicó. Tanto es así, que cuando se rehabilitó la Plaza de Santa Ana de la capital grancanaria contaron con él para que realizara las 95 flores talladas en piedra que ahora ornamentan el lugar.
Igualmente, el Gobierno de Canarias reconoció su labor otorgándole en el año 2005 el segundo galardón en los Premios a la Excelencia en la Artesanía.
Con su martillo, escoplo y radial da forma a la piedra azul aruquense, que es el material con el que desempeña sus labores artesanales, para crear perros, «a los que sólo les falta ladrar»; cincelar la cara de alguien para la posteridad; esculpir escudos de distintos equipos de fútbol; o, montar una enorme chimenea en su propia casa, para resguardarse del frío que acusa en el barrio de El Zumacal. Lo viejo y lo nuevo
Juan García González es un maestro carpintero que pasa sus horas en un taller que desprende una mezcla de olor a barniz y tea, restaurando muebles antiguos y dando forma con sus manos y la lija a talleros y loceros. A sus 45 años ha diversificado su negocio, aprovechando lo manitas que es ha puesto en marcha una casa rural (Las Calas de Valleseco), cuyo mobiliario ha sido realizado por él. Puertas, ventanas, mesas de noche, comedor y cocina. Todo tiene su firma en su pequeño hotel del barrio de Zamora, que regenta junto a su mujer.
Este restaurador también es muy conocido en el mundo de los apasionados de la artesanía. La Fedac, perteneciente al Cabildo, tiene en muy alta estima a Juan, confiándole en varias ocasiones distintos muebles para que los rehabilitara. El último de los encargos de la Fedac ha sido el de restaurar un viejo escaño, una especie de banco que se ponía en los patios y jardines de «la gente adinerada», comentó.
Por su parte, Inma Cárdenes se redescubrió como persona a los 58 años, edad a la que aprendió el oficio de ceramista. Ahora, con 73 años crea distintos elementos modernos para decorar, pues ella piensa que «para hacer artesanía canaria hace falta ser un erudito» y a ella lo que le gusta es estar al día y expresarlo a través de sus obras, que realiza con la técnica del churro. Al igual que Juan, en la decoración de su casa está su toque. Cerámicas por todas partes, incluso en el baño.